365 Decretos...: Uno Para Cada D

Después de largos años de compartir sus enseñanzas en un grupo de Autoayuda en Buenos Aires. Argentina. Desde 1986-1994. Fui impregnándome de su filosofía positiva. Con el pasar de los días podía comprobar los efectos de una coherencia entre pensamiento y sentimiento. Cada momento y de modo consciente formulaba una afirmación o un decreto para esperar y confiar que se haría realidad. Era amante de la filosofía y la psicología, me había formado en ella, muy a pesar de lo que estaba viviendo en esos momentos buscaba un cambio radical en mi vida. Un nuevo paradigma que me hiciera...