El oscuro secreto (Alas de fuego 4)

El capitán Fitzroy tiene a su cargo a una familia entera de indígenas. Pretende, mediante clases de religión e inglés, %13civilizar%13 a estos tres nativos de la Patagonia. ¿Serán la chispa que iniciará la civilización en aquella desolada tierra? José Fonollosa, el autor de Billy Bob y Sebastian Lefou, nos sigue desgranando emociones y desvelando las etapas del HMS Beagle, que zarpó el 27 de diciembre de 1831 del puerto de Plymouth y que en este segundo tomo se encuentra ya en julio de 1832 en Tierra del Fuego.

Daniel está ya en tercero de Periodismo, aunque hay cosas que no han cambiado: su relación con Alicia y sus poderes visionarios. Esta vez las visiones están relacionadas con México y unas muertes extrañas de jóvenes como él. La madeja empieza a enredarse cuando un profesor le propone viajar a ese país para colaborar en un proyecto de investigación histórica. Una vez allí volverá a vivir una historia de misterio, esta vez relacionada con oscuros ritos ancestrales a la sombra de las increíbles pirámides aztecas.

El duende VidCo ha hechizado a los habitantes de Villamaravilla... ¿Podrá Tino devolver a la normalidad a sus vecinos? «Tino y el duende VidCo» es un cuento que pretende que los más pequeños comprendan un poco mejor la realidad en la que nos encontramos en plena pandemia y, mientras se divierten con los personajes de Villamaravilla, conozcan y adopten las medidas higiénicas para evitar el contagio por COVID-19.

Life took me by unexpected paths, as a child I dreamed that the sky was an ocean of infinite crystal. And today I still feel it or thinking like that ... here I leave my love, my forgiveness, my pain, my passion, my devotion, my secrets, my ailments, my experiences. Hopes, failures, dedications, dreams of my imagination ... or creation ... whoever reads with his heart will feel identified. I started writing at age 17 for my first lost love ... that eternal and pure feeling that will never give up our hearts ... I admit that I also did it to fall in love. I never imagined that writing, feeling ...