El gran despertar

Los relatos agrupados bajo el título Si yo fuera un hombre, componen un puñado del mejor exponente del trabajo y la idea que mantuvo la vida de Charlotte P. Gilman: preocupación por la situación de las mujeres, sus relaciones con los hombres y la necesidad de arrostrar el propio destino. Las protagonistas suelen ser mujeres que en un momento determinado optan con voluntad y decisión por imponer un cambio radical en su vida. Tomando como punto de partida estas dificultades de las mujeres para encontrar su propio espacio, todas tienen en común el ímpetu con el que resuelven sus problemas.

Valentina y Natalia cumple, como en un rito, todas las reglas del relato romántico. El corresponsal del protagonista decide darle a un anónimo compilador la abundante correspondencia del "desdichado autor". De ese modo —como en tantas obras del periodo— las cartas son una forma de diario íntimo, el mejor vehículo para la reflexión y la introspección interior. El final del protagonista se puede adivinar, la intensidad de sus sentimientos lo supera... Pero el novelista no empeña su mayor pasión en la línea argumental sino en el tratamiento del lenguaje, el estilo, la construcción...

Noah Crawford is the most enticing woman he has ever known. It leads Delaine Talbot into a sensuous world of pleasure where both are taken to the brink, again and again. But when Noah discovers why the innocent girl sold her body to the highest bidder, hes faced with the biggest challenge he's ever had to face: Set her free.

Jace, Ash, and Gabe are three of the wealthiest men in the country. Jace wants a woman whose allure takes him by surprise. Jace and Ash share everything, including their women. When they meet Bethany, Jace begins to feel things he's never experienced before: jealousy. Jace isn't sharing Bethany with anyone. Even if it means turning his back on his best friend.