Novecientas abuelas

R.A. Lafferty, cuyo nombre completo es Raphael Aloysius Lafferty, fue un destacado escritor estadounidense de ciencia ficción y fantasía, nacido el 7 de noviembre de 1914 en el seno de una familia católica en la ciudad de Oklahoma. Su vida estuvo marcada por su amor hacia la literatura y un profundo interés por la historia, la religión y la mitología, lo que se reflejó en su estilo único y a menudo surrealista.

Desde joven, Lafferty mostró un gran talento para la narración, influenciado en parte por las tradiciones orales y los cuentos de su infancia. A pesar de comenzar su carrera en la escritura relativamente tarde, ya que su primer relato fue publicado en 1960, en poco tiempo ganó reconocimiento en la comunidad literaria por su originalidad y su habilidad para mezclar géneros.

La obra de Lafferty se caracteriza por su uso del lenguaje, sus giros de trama inesperados y su enfoque en lo absurdo. A menudo exploraba temas como la relación entre el hombre y lo divino, el tiempo, y la naturaleza del conocimiento. Su estilo a menudo se describe como quirky y poético, lo que le permitió destacarse entre sus contemporáneos.

• Obras Principales:
  • "Past Master" (1968) - Una novela que explora la vida y las ideas de un hombre que viaja en el tiempo y las implicaciones de sus acciones.
  • "The Devil is Dead" (1965) - Una obra que reflexiona sobre la condición humana y la moralidad.
  • "The Reefs of Earth" (1968) - Una novela que mezcla la ciencia ficción con reflexiones filosóficas sobre la existencia.
• Premios y Reconocimientos:
  • Ganador del Premio Hugo en 1975.
  • Nombrado gran maestro por la Asociación de Escritores de Ciencia Ficción.

Además de sus novelas, Lafferty escribió numerosos cuentos que lo consolidaron como un maestro del relato corto. Su colección de cuentos "The Complete Lafferty" es una muestra de su talento para encapsular ideas complejas en narraciones breves. Muchos de sus relatos abordan la cultura popular y los mitos de América, combinando humor y crítica social.

La vida personal de Lafferty también fue interesante. Se casó con su esposa, Ruth, en 1942, y juntos tuvieron varios hijos. A lo largo de su vida, Lafferty mantuvo un enfoque único sobre la espiritualidad, lo que se refleja en su escritura, a menudo entrelazando la fe y la ficción. Durante su carrera, fue un defensor de la libertad creativa y se opuso a las tendencias comerciales que dominaban la industria editorial de su tiempo.

En la década de 1980, Lafferty retiró parcialmente su producción literaria, aunque continuó siendo una figura influyente en círculos literarios. Su legado ha perdurado a lo largo de las décadas, y ha inspirado a una nueva generación de escritores de ciencia ficción y fantasía. A pesar de que su obra no siempre fue ampliamente reconocida durante su vida, ha ganado admiración y respeto póstumo, con muchos críticos revisitando su trabajo y otorgándole un lugar prominente en el canon de la literatura de ciencia ficción.

R.A. Lafferty falleció el 18 de marzo de 2002 en Oklahoma, dejando un legado perdurable en el mundo de la literatura. Su obra, con su combinación de profundidad filosófica y creatividad desbordante, sigue siendo un referente en el género, siendo un recordatorio de que la imaginación humana no tiene límites.

Es posible asegurar que a todos los seres humanos les gusta imaginar. Desde terribles monstruos que habitan en las sombras, pasando por cruentos crímenes sin resolver, rematando con vastos paisajes en planetas desconocidos... La mente humana tiene la necesidad de crear, en algunos casos, su propia realidad. Debido a eso, la literatura de ficción nació, ya que es la herramienta con la cual el ser humano puede dar vida a todo aquello que ya vive en su mente. En esta antología se presenta a veinticuatro autores hispanoamericanos, quienes nos comparten un poco de todo lo que vive en su mente...

Doce casas iguales rodean un jardín de cuyo centro irradian las leyes invisibles del tiempo. La mujer se dirige a la primera de las puertas, que se abre sin llave, y descubre un interior, absorto en sí mismo, en el que otra mujer lleva a cabo una tarea. En cada casa hallamos una labor diferente, las moradas se suceden como los meses y las estaciones, y la mujer visita el corazón ensimismado de estas estancias íntimas. El lápiz en el papel, la aguja en la tela, los dedos en el piano, el cuchillo en la tabla... los distintos alfabetos de un único oficio de luz y de tinieblas.

Y de repente fue ayer es la historia de dos amigos, Óvalo y Efraín, que verán, igual que los protagonistas de las fábulas más fascinantes, cómo un huracán une sus destinos y los lleva a transitar por los rincones más oscuros y aterradores de un país, Cuba, que con el tiempo aprenderán a dominar usando muy diversos métodos. El bello y carismático Óvalo lo logrará a través de la revolución política. El silencioso y desgarbado Efraín, en cambio, se encargará de llevar a cabo una revolución mucho más sutil pero, tal vez, más poderosa: la que pueden provocar las brillantes...

Con el apoyo del periódico para el que trabaja, la periodista Sara Yunas decide investigar qué pudo haber pasado con el difunto Pedro Ospina, un financista que manejaba el dinero de varios personajes influyentes y poderosos, entre quienes se cuenta la mayoría de habitantes del edificio en donde vive Sara. La llevará a descubrir los más sórdidos secretos de sus vecinos, que van desde el adulterio, las rencillas familiares, la doble moral y la evasión de impuestos hasta el narcotráfico y la corrupción de la justicia.