Gray Naip'ddle

En los Pirineos un grupo de mercenarios liderados por Courtland Mac-Carrick prestan sus servicios al general Reynaldo Pascal. Pero cuando Court se revela contra el general, Pascal ordena matarle. Court, malherido, logra escapar, pero planea vengarse y secuestrar a la preciosa prometida del general. Lady Annalía Tristán Llorente odia a su captor pero siente hacia él una inexplicable atracción.

Tras sobrevivir a la peor de sus pesadillas, Noah Anderson se enfrentará cara a cara con sus demonios y a una encarnizada lucha interior sin retorno que la llevará a descubrir quién es ella y quién es realmente su marido, Clive Wilson. Pronto se verá envuelta en un triángulo amoroso en el que se entremezclarán los sentimientos ocultos, los recuerdos y el deseo. Sin embargo, una repentina pérdida la sumergirá en un estado de melancolía difícil de superar. Mientras tanto, en la ciudad de Manhattan, Gabriel Gómez deberá tomar la decisión más difícil de su vida, y se debatirá...

La Disciplina clericalis forma parte de ese gran mar que significa narrar una historia; entre sus cuentos se conjuntan las raíces del Oriente con la tradición nacida en griego y latín. Su autor, Pedro Alfonso, resulta el eslabón medieval que permitió el tránsito de narraciones de un continente a otro, de las lenguas semíticas al idioma de los Rómulos y Fedro; su influencia ha sido profunda en Europa y sus historias cuentan ahora con una edición actualizada, y copiosamente anotada, de la mano de Edgar Vargas Oledo en colaboración con María Jesús Lacarra.

HQÑ 350 ¿Serías capaz de hacerte pasar por pareja en un reallity con tu mejor amigo? Bowie y Mireya se apoyan mutuamente, desde hace cinco años, para superar la pérdida de Katia en un fatal accidente de tráfico. Conducía Bowie. Katia era su novia, el amor de su vida... y también la mejor amiga de Mireya. Desde entonces, se han vuelto inseparables. Pero ¿tanto como para aceptar lo de ese concurso que les proponen sus amigas? ¿Hacerse pasar por pareja en un reallity? ¡Nunca! ¿Demostrar públicamente cuánto se conocen? ¡Ni hablar! Pero... ¿Y si el premio fueran cincuenta mil...