Foc cruzado

Lo más doloroso de la guerra son las marcas que deja cuando termina. Killian no es ajeno a la sensación del dolor pero en sus hombros carga un peso mucho mayor, desde que acabó toda la tribulación, él trató de huir tan lejos como pudo pero en un universo tan extenso, la frontera no se limitará a lo conocido. El objetivo de la humanidad se ha enfocado en avanzar y ver hacia el futuro, cada planeta del sistema solar ha sido habitado y el nuevo límite se avecina en la oscuridad del espacio, aguardando con misterio. Esta es la historia de Killian, el hombre que lo perdió todo por las...

¿De qué sirve la soledad si no se tiene a alguien con quien compartirla? No son si no aquellos espíritus, agobiados y marchitos, los que tienen las más grandes e inimaginables historias. Gargantas que duelen por guardar palabras, corazones que sangran por sentir. Si solo se vive para sufrir, qué mas da que una vida se extinga en el anonimato. Los años transcurren sin que los corazones cambien y lo único constante es el odio y el desprecio. Temblando de frío, sobre la comodidad de las piedras y el arrullo del hambre, un pequeño osezno reprocha su vida con todo su ser.

Los muchachos de Jo (1886) es la continuación y desenlace de las famosas novelas de Louisa May Alcott – Mujercitas, Aquellas mujercitas y Hombrecitos– y en ella se cuenta cómo han crecido los niños que Jo Bhaer –antes Jo March– y su marido han educado en su pequeña escuela en Plumfield: el rebelde Dan, el marinero Emil y el prometedor músico Nat, entre otros.

«Estos placeres violentos conducen a finales violentos, siempre lo has sabido». Corre el año 1927 y Shanghái se tambalea al borde de la revolución. Después de sacrificar su relación con Roma para protegerlo de la guerra entre clanes, Juliette se centra en llevar a cabo su objetivo. Un movimiento en falso y su primo usurpará su puesto como heredera de la Pandilla Escarlata. La única forma de salvar al chico que ama de la ira de los Escarlatas es provocar que él desee su muerte por asesinar a sangre fría a su mejor amigo. Roma todavía se está recuperando de la muerte de Marshall, y ...