El monje Laskaris
Gustav Meyrink (1868-1932) entró en el mundo literario forzado por unas circunstancias adversas que dieron un vuelco radical a su vida. Joven propietario de un banco de Praga, provocador de escándalos, duelista, estudioso del ocultismo, fue víctima de una confabulación que estuvo a punto de costarle la libertad y la salud al ser acusado de desfalco. Por fortuna se declaró su inocencia, y poco después tuvo que hacer pública su bancarrota. La literatura se convirtió entonces en su refugio y en un precario medio de vida. En su obra, Meyrink vertió no sólo sus profundos conocimientos de ...